Cómo preparar tu sistema de aire comprimido para las bajas temperaturas
¿Sabías que las bajas temperaturas pueden influir en el estado de la instalación de aire comprimido y en el aire comprimido? Un mantenimiento y una climatización deficientes podrán deteriorar gravemente los equipos.
Pero, en concreto, ¿qué podría pasar?
Condensación
Con temperaturas ambiente bajas, aumentan las posibilidades de que se forme condensación. Esta condensación puede ocasionar grandes daños a los tubos, herramientas y otros equipos, generando fugas de aire y averías que supondrían costos elevados.
Líquido en el aceite
Cuando la temperatura del compresor está baja, ocasiona humedad en el aceite. Esto tiene consecuencias en la lubricación de la máquina, provocando un mal funcionamiento o averías.
Congelación
Cuando las temperaturas son muy bajas, los tubos de aire comprimido, los drenajes y filtros de condensación pueden llegar a congelarse. De la misma manera, el refrigerador del compresor puede congelarse y averiarse.
Ahora que ya sabemos algunos de los problemas con los que podríamos encontrarnos si no acondicionamos adecuadamente nuestro sistema de aire comprimido, vamos a ver cómo preparar realmente nuestro sistema para que las bajas temperaturas no le afecten y así evitar averías.
- Asegurar que todos los purgadores y sistemas de tuberías estén aislados, especialmente si están ubicados fuera del edificio. Esto evitará que revienten las tuberías y que entre el condensado en el suministro de aire.
- Contar con un sistema de recuperación de calor. Al proporcionar aire comprimido, los compresores de aire generan grandes cantidades de calor, que puede recuperarse y utilizarse en varios procesos dentro de una planta o instalación.
- Comprobar que no existen anomalías en los purgadores. Los purgadores suelen ser los componentes más olvidados en lo que respecta a los sistemas de aire comprimido. Esto ocurre porque no existen estos purgadores, o bien porque se instalan, pero se mantienen ocultos. Cualquiera de los dos casos puede ocasionar problemas.
- Mantenimiento de los filtros de aire. Como sucede con los purgadores, los filtros suelen olvidarse o dejarse para el último momento. Sin embargo, estos filtros desempeñan una función importante para garantizar la pureza del aire necesaria para una aplicación determinada. Por lo que es aconsejable realizar comprobaciones y mantenimientos programados de los filtros de aire para garantizar la pureza del aire adecuada y el funcionamiento sin problemas.
- Detectar y reparar fugas. Con frecuencia es difícil localizar o escuchar una fuga de aire en el sistema de tuberías de aire comprimido, pero eso no significa que no las haya. Como las fugas más pequeñas son difíciles de detectar, se recomienda invertir en una auditoría de aire comprimido para reconocer y reparar las fugas existentes, lo que dotará al sistema de aire comprimido de una mayor productividad y eficiencia.
No pierdas de vista todas estas indicaciones y buenas prácticas para evitar los riesgos propios de esta época del año. Anticípate y prepara tus equipos de aire comprimido para enfrentar las bajas temperaturas. ¿Quieres conocer más? ¡Consúltanos sin compromiso!